viernes, 27 de enero de 2017

El borracho y la asesina


Figura anacrónica
con altas dosis de idealismo
socialmente, un tanto sospechosa
y aburrida.
Arrasta hacia su persona
un poco de aversión general
y justificada.

La revisión simple
de la mirada rápida
concluiría que no da la talla.

La encontró en un bar desconocido
que apestaba al olor de los borrachos.
La transformó de prostituta en asesina.
Nadie sospecharía
que bajo el talante incierto
fluía la vida.

Cuando todo se vuelve indecente
siempre llega un rescate impertinente
y alguien te ve
por muchas fosas que caves.

Y ahí van
un mecenas algo borracho
con su prostituta asesina
que destacan en la mirada rápida.
Por debajo
se erigen
monumentos morales
altas dosis de nobleza
que conocen solo los dos
y los rescatan.