Yo no quiero ser espejo de un sistema
que estereotipa e idiotiza
me mantengo despeinada y distraída.
Aunque a veces parezca que nos engulle
la vorágine siempre presta a engatusarnos
aparecen pequeñas luces en el naufragio
rescatando lo que queda de auténtico.
Y, de puro caprichosa, me subo las medias
me visto sin combinar los colores
me río con desconocidos
y abrazo la inocencia de los niños.
Me mantendré discutiendo con dragones
criticando a todas las princesas
que tropiecen con tantos tacones
que el paraguas les resguarde las tristezas.
Y si he de elegir
elegiré los libros
la comodidad de un pijama a rayas desgastado
caminar descalza entre la arena
descansar de este mundo entre el pasto.
